
El Día de las Madres en República Dominicana cobró un significado especial con una historia que tocó el corazón de miles: el reencuentro de Catherine y doña Suleida, madre e hija separadas por más de 16 años.
Desde que emigró a Estados Unidos en busca de un futuro mejor, Catherine nunca dejó de mantenerse presente en la vida de su madre. A través de cajas llenas de recuerdos, detalles y cartas escritas a mano con frases como “Para que me sientas cerca, aunque esté lejos”, fue construyendo un puente emocional a pesar de la distancia.
Estos envíos, gestionados con el apoyo de Tupaq, se convirtieron en una especie de hilo invisible que las mantuvo unidas. Fue precisamente la constancia y el amor detrás de cada paquete lo que motivó al equipo de la empresa a dar un paso más allá: ayudar a que madre e hija pudieran abrazarse de nuevo.
Coordinando permisos, vuelos y todo lo necesario, prepararon una sorpresa que doña Suleida jamás imaginó. Creyendo que recibiría un envío especial, abrió la puerta y se encontró, de frente, con su hija. El tiempo se detuvo. Lágrimas, risas y un abrazo suspendido en el aire sellaron un momento que no necesita traducción.
El video del encuentro, compartido en redes sociales, conmovió a miles de personas tanto en el país como en la diáspora. Más que una simple historia, fue un recordatorio de que el amor, cuando es genuino, encuentra caminos para volver.
Puedes revivir ese instante visitando la cuenta oficial de Tupaq en Instagram: @tupaqcourier.